Después del mercadillo

Hoy llevo un día muy raro... tengo el ánimo muy triste y no doy pie con bola... Ayer leía cómo en China, un bebé que había llegado a LWB con una cardiopatía muy severa, tras haber sido trasladado a Shanghai para que lo evaluaran e intentar hacer algo por él, nos era 'devuelto' diciendo que no había nada que hacer. Tenía pendiente escribir un email sobre el mercadillo de Logroño, pero no pude. Otra noticia mala terminó parándome en seco. El pequeño Gonzalo a quien le iban a hacer un cateterismo, estaba en peligro... el cateterismo no fue bien y le estaban intentando estabilizar. Según pasaban los minutos, las horas, iba empeorando... hasta que esta madrugada, su corazoncito, ese que ha peleado tanto y que tan felíz ha sido desde que encontró a su familia, se paró definitivamente.

Hoy más que nunca, veo necesidad de que unamos fuerzas y medios para ayudar a estos niños. Me siento tan impotente... sé que no podemos luchar contra natura, pero este niño, Gonzalo ha tenido la inmensa suerte de conocer lo que es el amor de unos padres, de unas hermanas. Si esta generosa familia, sabiendo lo que tenía, no hubieran decidido adoptarlo para amarlo incondicionalmente, él no hubiera durado tanto ni se hubiera ido rodeado de tanto amor. Él ha sido felíz, muy felíz, gracias a ellos. Rosa, Arturo: GRACIAS!

Pensaba hacer una entrada comentando en cómo fue el mercadillo, pero todo lo que os iba a contar me parece ahora tan 'relativo'... que me quedo con lo importante para los niños, me refiero desgraciadamente al dinero (que tanto necesitamos para ayudarles...), hemos recaudado otro buen pellizco para las casas de curación. Sé que lo que estamos haciendo por ellos salvará muchas vidas gracias a la aportación que habéis hecho muchos de vosotros. Gracias a los que nos visitasteis y gracias también a los que virtualmente nos acompañasteis. También me gustaría agradecer, de todo corazón a Sandra, Pedro, Natalia, Rebeca, Belén, Begoña... por su ayuda este fin de semana. Ha sido estupendo conoceros en persona.

Seguiremos trabajando por ellos pero me gustaría recordaros que no lo podemos hacer sin vuestra ayuda. Por favor, no os olvidéis que hay miles de niños que no tienen a nadie que vele por ellos. Ayudarnos a llevar la esperanza a sus vidas.

Si queréis colaborar económicamente podéis hacerlo con cualquier cantidad, siempre digo que no hay cantidades grandes ni pequeñas, cada aportación es valiosa, valiosísima.

Caja Madrid: 2038 1865 4360 0028 0657
Fundación Love Without Boundaries